HISTORIA DE LA CIUDAD DE EL ALTO
ESCUDO DE LA CIUDAD DE EL ALTO
El escudo de la ciudad de El Alto fue aprobado mediante Ordenanza Municipal Nº 015/88. En la parte superior y al centro están representados el sol tiwanacota y el Huayna Potosí. Más abajo, un detalle urbano-industrial, al rededor del escudo lleva este mensaje «Desde la cumbre del mundo levantase la ciudad donde jamás se pondrá el sol de nuestra raza», está rodeado por ramas de kantuta y khiswaras unidas con la enseña de Bolivia
BANDERA DE LA CIUDAD DE EL ALTO
La Bandera de la ciudad de El Alto fue aprobada mediante Ordenanza Municipal Nº 016/89. Sobre una franja verde se sobrepone el rojo, a la izquierda, de forma triangular.
REFERENCIAS HISTÓRICAS DE LA CIUDAD DE EL ALTO
El ancestral referente histórico de la Ciudad de El Alto, se la vincula a la historia de La Paz, ambas transitaron, casi de manera paralela, a lo largo de más de un milenio de recorrido.
Sin embargo, la creación de El Alto, como ciudad tiene como antecedentes a las demandas de diversas organizaciones vecinales, que exigieron esencialmente servicios de infraestructura básica.
En la década de los años 40, se formaron, en la planicie alteña, las primeras juntas de vecinos, pese a que aún no se diferenciaban las zonas del norte y del sur. El dirigente que cuenta con documentación de la fundación de su zona, es Manuel Chávez Ticona, que organizó la junta vecinal de Alto Lima, el 4 de diciembre de 1948, otras de la época, no demuestran aún documentación apropiada
El 3 de julio de 1957, se creó el Consejo Central de Vecinos de El Alto de La Paz, en base a 7 juntas vecinales; en 1966 cambió su razón social, a Sub Federación de Juntas Vecinales de El Alto de La Paz, y en 1979, fue reconocida como Federación de Juntas Vecinales de El Alto. El propósito central de esta organización vecinal, fue la procuración de servicios básicos para la población, y paralela a esas demandas, las peticiones para la creación de la Cuarta Sección de la provincia Murillo.
El 23 de abril de 1970, el alcalde de La Paz de ese entonces, Hugo Suárez Guzmán, aprobó la Ordenanza Municipal N°116/70, que creó la Sub Alcaldía de El Alto de La Paz, y diez días después, Jaime Machicao Méndez, fue posesionado como tal.
El 6 de marzo de 1985, el Congreso Nacional, sancionó la Ley 728: “Créase la Cuarta Sección municipal de la provincia Murillo con su capital El Alto de La Paz, del departamento de La Paz…”.
A principios de 1988, con sendas ordenanzas municipales, se crearon: el escudo, la bandera y el himno de El Alto. La Ley 1014, del 26 de septiembre de ese año, sentenció: “Elévase a rango de ciudad a la población de El Alto de La Paz, capital de la cuarta sección municipal de la provincia Murillo del departamento de La Paz …”.
A esos puntuales antecedentes históricos, deben ser sumados, otros que se constituyeron en hitos históricos del país: como el Cerco a La Paz, en 1781, encabezados por Tupac Katari y Bartolina Sisa, asimismo, los movimientos militares en 1899 promovidos por los Conservadores y Liberales.
El Siglo XX, fue fecundo. A los tres primeros años, fue inaugurado el servicio ferroviario Guaqui-El Alto, posteriormente le siguieron otros dos más; en 1904, llegaron los primeros automóviles, y en 1920 la inauguración de la era Aeronáutica; la celebración central de los actos con motivo del Centenario de Fundación de la República de Bolivia, la partida del Ejército Boliviano a la Guerra del Chaco, la multitudinaria recepción de la llegada de Víctor Paz, después del triunfo de la Revolución Nacional en 1952, tuvieron como escenario al territorio alteño.
También cobraron relieve, la proclamación de presidente de la Republica de Juan José Torrez en 1970, la inauguración de la Autopista en 1978. Diez años después, la llegada del Papa Juan Pablo II y la celebración de la Misa, ante más de 600 mil personas. A inicios de 1989, la FEJUVE, creó la Universidad Técnica Laboral de El Alto (UTLA), actual Universidad Pública y Autónoma de El Alto (UPEA).
En esa década, se reveló una faceta que se convertiría en característica de esta Ciudad: su población. En 1976, se admitió la existencia de 95 mil habitantes; para 1988, ascendió a 307 mil, y cuatro años más tarde, a 405 mil. Para 2022, se proyectó 1’1 MM de habitantes.
El Siglo XXI, fue inaugurado con las emblemáticas movilizaciones sociales, más conocidas como el “Levantamiento Indígena de Achacachi”, que inclusive, se utilizó territorio alteño para los bloqueos de caminos y refriegas sociales, encabezados por Felipe Quispe. En 2003, esta demanda pasó con un movimiento social que lindó con lo épico: febrero, septiembre y octubre; en éste último, se exigió la nacionalización de la hidrocarburos, la no venta de gas a Chile, la convocatoria a una Asamblea Constituyente, entre otros, que se la conoció como: “Agenda de Octubre”. El saldo de esa protesta, cobró la vida de más de 60 alteños, 400 heridos y la renuncia de presidente Gonzalo Sánchez de Lozada.
A inicios de enero de 2005, la FEJUVE, inició un Paro Movilizado Indefinido, que exigió la rescisión de contrato entre el Gobierno Central y la empresa “Aguas del Illimani Sociedad Anónima” (AISA). El gobierno asumió la responsabilidad de actuar en ese sentido, pero cuatro meses después, otra contundente muestra de rebeldía, provocó una paralización de actividades, y obligó al presidente de la República Carlos Mesa, a renunciar
A mediados de 2007, con la proclama de: “La sede no se mueve”, se realizó “El Gran Cabildo” en el principio de la Autopista La Paz-El Alto, en él se estimó la concentración de 2 millones de personas. Dos años después, se promulgó en la Ciudad de El Alto, la nueva Constitución Política de Estado, como producto de la Asamblea Constituyente y del respectivo Referendum.
En 2014, fue inaugurado la primera línea (roja) de un nuevo sistema de transporte: el teleférico; el primer tramo Zona 16 de Julio (El Alto) y la ex estación de Ferrocarriles (La Paz). Posteriormente, lo harían las otras líneas. Dos años después, de esa ocasión, se suscribió el convenio, para el emplazamiento del Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología Nuclear, y al siguiente año, se inauguró el “Estadio Municipal de la Ciudad de El Alto”, habilitado para encuentros deportivos en la categoría profesionales.
A finales de 2020, fue inaugurado la “Jach’a Uta” (Casa Grande), edificio para la administración del Gobierno Autónomo Municipal de la Ciudad de El Alto. También deben inscribirse en esta agitada y sinuosa historia alteña, los luctuosos hechos de finales 2019, ocurridos principalmente en Senkata.
Con el lema; “El Alto de pie, nunca de rodillas”, que se constituye en una especie de un “Estatuto Oral Orgánico”, la Ciudad de El Alto, en el Siglo XXI, tiende a apuntarse como el referente nacional.
Periodista e historiador alteño
Johnny Fernández Rojas